
En búsqueda de la igualdad dentro del deporte
Con motivo de la celebración de la Semana Internacional de la Mujer y con el objetivo de dar visibilidad a la importancia de la mujer en el deporte, hemos tenido el honor de conversar con Ana Muñoz, una joven de 21 años procedente de Lucena, Córdoba, que actualmente está estudiando el último curso de Derecho en la Universidad de Salamanca y, además, entrena en la Escuela Élite de Kickboxing.
Ana ha compartido con nosotros, desde su experiencia y su punto vista, cual es el papel de las mujeres en el mundo del deporte y cómo se podría dar más visibilidad a los encuentros femeninos.
Queremos agradecer a Ana su tiempo y buena predisposición, os dejamos sus reflexiones:
- ¿Cómo entraste en el mundo del deporte de contacto? ¿Por qué optaste por el kickboxing?
Me inicié en el mundo del deporte de contacto por mi madre, ella de joven practicaba Taekwondo, y a mí, desde de pequeña, me gustaba saltar y corretear por el tatami, así que decidieron apuntarme también a Taekwondo.
Más adelante, para ampliar mis conocimientos sobre la técnica del puño, de manera paralela comencé a practicar kickboxing y ahí fue cuando este deporte me cautivó. Como opinión personal, espero que nadie me linche, el kickboxing me parece un deporte más completo, ya que combina tanto técnica de puños como de pierna, y todo lo que ello conlleva.
- A nivel personal, ¿En algún momento de tu vida te has sentido discriminada por ser mujer dentro del mundo del deporte de contacto?
Por suerte nunca he sufrido ninguna situación de discriminación, primero porque mis padres me han mostrado siempre su apoyo para que practique esta modalidad de deporte, ya sabéis que hay padres que directamente no quieren que sus hijas hagan este tipo de deportes, ya que los consideran injustamente “de niño” y esto, sin duda, es una discriminación muy grave.
Además, siempre he tenido la suerte de tener compañeros que no han visto ningún tipo de diferencia entre ellos y yo. Ojalá esta siempre fuera la tónica general en todos los ámbitos, no solo en el de deporte.
No obstante, sí que es verdad que, cuando era pequeña, los niños no querían competir contra mí porque, o bien no querían “pegar a una niña”, o no querían que “una niña les pegara”. Esto no deja de ser una cosa de niños, pero que hay que corregirles para que ya vean, desde pequeños, que somos iguales.
- ¿Consideras que hay machismo en el mundo del deporte de contacto?
Dentro del mundo del deporte de contacto, las mujeres hemos demostrado, y me molesta utilizar la palabra demostrar ya que considero que el deporte de contacto depende de las capacidades y el esfuerzo de cada uno, no de si eres hombre y mujer, que podemos ser iguales que los hombres. Por tanto, a pesar de casos aislados, no creo que haya machismo.
Sin embargo, desgraciadamente, sí he visto actitudes discriminatorias entre la gente de fuera, por ejemplo, hay gente muy dada a hacer comentarios que insinúan que las mujeres que practican este tipo de deporte son más masculinas. Y eso debe acabar ya. Son prejuicios y estereotipos totalmente injustificados.
- Los deportes de contacto, en general, no tienen la visibilidad que merecen a nivel nacional, ¿Crees las categorías femeninas están más invisibilizadas aún?
Es evidente que sí que creo que están más invisibilizadas, pero principalmente va muy relacionado con lo que decía antes, porque la gente, por prejuicios, piensa que un combate femenino es menos interesante que uno masculino. Y realmente, los combates femeninos son espectaculares, y dependen, principalmente, de quién luche y no de su sexo.
- Hablando del deporte femenino en general, ¿Consideras que se le da la suficiente visibilidad? ¿Crees que las administraciones públicas están ayudando a concienciar de la importancia del deporte femenino?
Considero que desde el punto de la Administración Pública sí se está ayudando a aumentar la visibilidad del deporte femenino.
Las Federaciones también están haciendo un gran trabajo, de hecho, la Federación Española de Kickboxing (FEKM) está concienciada en aumentar la visibilidad de las competiciones femeninas, por ejemplo, habían organizado un torneo exclusivamente femenino para marzo, desgraciadamente, debido a la pandemia, no se ha podido realizar. Pero habrá más ocasiones. Otra de las cosas que más agradezco a la FEKM es que, en el último campeonato de España en el que se televisaron las finales más reseñables, la Federación decidiera retransmitir de forma igualitaria los combates masculinos y femeninos.
Por otro lado, desde la empresa privada también se está poniendo mucho empeño en alcanzar la igualdad en el mundo del deporte. Una de las empresas que más está ayudando es Iberdrola, organizando todo tipo de torneos y ligas.
- ¿Qué crees que habría que mejorar para que hubiera una igualdad efectiva entre la visibilidad del deporte femenino y masculino?
Aún queda mucho camino por recorrer y sin duda, una de las cosas que primero hay que cambiar es la conciencia de la gente. La gente es el público, y de ellos depende que algo se vea o no, no de los deportistas. Mientras haya gente que piense que el deporte femenino no merece ser visto, no se va a ver, por mucho que se publicite.
Está muy bien que las administraciones, las empresas y los clubes ayuden (y sigan ayudando) a la visibilización, pero hay que ir directamente a la raíz del problema y hacer ver al público general que el deporte masculino es tan interesante como el femenino.
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